"Yo Soy lo que es la Abundancia. Todos y Todo es perfectamente abundante en toda situación y todo momento. No tengo que pedir nada pues todo siempre está ahí. Lo que pido es lo que Yo mismo Soy y por ende siempre está disponible para mí. No tengo ningún requisito para recibir todas las bendiciones de todas las formas posibles, en pensamiento, en sentimiento y en toda forma material."La abundancia es lo que Eres. Es lo que ES Todo por siempre y desde siempre.
Excepto ahora que has inventado un juego, un sueño, algo falso y distinto a la Esencia de Ti y de Todo. Lo que ves, lo que piensas ahora parece reflejar únicamente aquello que NO eres: escasez y limitación.
La abundancia no es lo que el mundo cree que es. Debes saber discernir antes de poder reconocerla, de lo contrario seguirás buscando algo que realmente no quieres. Y por eso tantas veces has conseguido muchas cosas que creías te iban a completar solo para darte cuenta que seguías incompleto luego de conseguirlas.
¿Tienes bienestar? ¿Tienes una mente que no se preocupa nunca? ¿Experimentas una alegría pura cuando estás en compañía de cualquier hermano/a? ¿Sientes tu eternidad y la de los demás en cada situación a la que te lleva tu espíritu? ¿Sabes y sientes con certeza la verdad de que siempre estás en un estado de completa invulnerabilidad?
La abundancia no es algo que se deba alcanzar, sino algo que ya está ahí.
La abundancia no es un logro o algo superior, mejor o diferente que otra cosa, sino algo que siempre está ahí, sin posibilidad de perfeccionamiento puesto que es perfecto.
La abundancia no es algo que se desea sino el saber que siempre estamos completos.
La abundancia es saber que nunca existe nada impidiendo tu perfecta completitud.
La abundancia no llega cuando se pide sino cuando se reconoce y acepta.
La abundancia en este plano es saber que antes de que se pueda necesitar algo estará ahí provisto por tu propia esencia que es la de todos.
La conciencia abundante no puede sentir temor, preocupación o la necesidad de planear para conseguir algo. Solo se aquieta y recibe lo que está ahí en todo momento, en todo lugar y circunstancia sin posible error o fallo.
Alguien con una cuenta bancaria llena de dinero y una conciencia llena de temor y preocupación no tiene abundancia. Una conciencia abundante nunca se preocupa de su cuenta bancaria pues sabe que siempre habrá, ya sea mucho o poco, pero siempre, y que todo lo que está ahí le permitirá seguir experimentando la felicidad interna que es su conciencia abundante.
Ahora que empiezas a recordarlo, a aceptarlo, a permitirlo, todos tus pensamientos y creencias y todo lo que ves, empieza a tener el brillo, cada vez más luminoso de la abundancia. Tus relaciones se llenan de abundante amistad e indefensión. Tus creaciones comunican la eternidad y la perfección. Tu cuerpo deja de envejecer y refleja solamente belleza y pureza. Tu renacimiento ilumina todo el mundo, bendice y lleva de la mano a todos los que empiezan a reconocerla.
¡La abundancia es lo que Tú eres!
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