
El eclipse total terminará en pleno océano Pacífico, después de 3 horas y 25 minutos de recorrido por la superficie terrestre, a lo largo de una trayectoria que se extenderá por unos 15.150 kilómetros.
Las diversas fases del eclipse pueden ser visibles si disponemos de la suficiente protección necesaria para la observación directa del Sol. El uso de gafas protectoras, filtros, etc.
A simple vista y durante la totalidad podrán ser visibles cerca del Sol, situado en la constelación de Cáncer, tanto el planeta Venus como Mercurio. La estrella Sirio, la más brillante del cielo, estará unos grados al sur.
José Ripero es presidente del Centro Astronómico de Ávila
Fuente elmundo.es
Colaboradora: Elizabeth Genesca