Asumo la total y absoluta responsabilidad de todo lo que está ocurriendo en Venezuela. Amorosamente pido perdón por todos estos actos. Gracias por permitirme el honor de participar de este proceso de limpieza de memorias ancestrales, tan arraigadas en nuestra cultura. Gracias por esta convocatoria a asumir la sagrada misión, que según el Plan de Dios, corresponde a esta ocasión.
Asumo la responsabilidad espiritual de amar. Reconozco que la conflictividad es una manifestación de desamor, y por lo tanto es también una solicitud de amor, es una convocatoria al amor. Asumo decirle a todos y cada uno de los 27 millones de venezolanos, de todos los colores, culturas ideologías creencias y posiciones: Te amo, te amo, te amo.
Gracias a este momento histórico, millones de venezolanos podemos compartir esta percepción sanadora, liberadora y pacifista. Gracias a todos los venezolanos por esta gloriosa convocatoria a asumir el paradigma del amor. Gracias porque quien siente miedo, rabia, odio, depresión, desesperanza está convocando amor.
Honro a todos los venezolanos y a todos los habitantes de esta Tierra de Gracia. Honro a todos nuestros ancestros, con inmensa gratitud por habernos dado la vida y todo lo demás que hemos recibido de ellos.
Amorosamente entrego en las manos de Dios todo lo que está aconteciendo en Venezuela y en América.
Asumo la responsabilidad de construir un lenguaje de paz, sin juicios, sin quejas. Un lenguaje amoroso, de reconocimiento de la esencia del ser, recordando que la esencia del ser es imagen y semejanza de Dios. Un lenguaje con plena responsabilidad espiritual, con gratitud, con honra, con bendiciones, con la gracia que concede el perdón.
Elijo recordar que el verbo tiene un poder creador. Elijo crear con el verbo la Venezuela de la Paz.
Te amo Venezuela. Creo en ti Venezuela, creo en ti venezolano. Te reconozco, eres hijo de Dios, eres amor, eres paz, eres luz. Esta es la verdad y la verdad siempre prevalece.
Con amor …
Gracias a Elizabeth Genesca que me mandó esta hermosa invocación Ho' oponopono para Venezuela. Gracias a Guido Guedez por escribirla.
Namaste
susana colucci