Es por eso que la Iglesia católica conmemora cada 28 de diciembre la fiesta de Los Santos Inocentes, para recordar ese sangriento día, hecho que podría explicar además porque Jesús nunca regresó a su pueblo natal y María dejara que todos creyeran que había nacido en Nazareth, cosa que puso en duda el cumplimiento de la profecía que lo anunciaba... todo un rollo.
Interesante observar que la tradición popular la ha convertido en un día para gastar bromas, que en un inicio fueron inocentes pero que al día de hoy pueden ser de muy mal gusto.
Se cree que La Fiesta de locos, celebrada principalmente en Francia el primer día de cada año honrando al asno en que cabalgó Jesús el domingo de Ramos al hacer su entrada triunfal en Jerusalén, podría ser la festividad que dio pie a esta curiosa forma de conmemorar un hecho sangriento.
En España, las personas se pegan "monigotes" y muñecos de papel en la espalda; en el Salvador el día se convierte en una colorida festividad en la que asisten cientos de personas a una feria popular con variedad de gastronomía y artesanías y en algunas zonas de América, el que preste algo se expone a perderlo puesto que el que lo recibe es libre de apropiarse de ello diciendo: "Inocente palomita que te dejaste engañar, sabiendo que en este día nada se puede prestar" o "Herodes mandó a Pilatos, Pilatos mandó a su gente; el que presta en este día pasará por inocente".
Hasta los medios de comunicación se contagian con la fiesta y publican noticias que luego desmienten.
Así que atento para que este 28/12 no caigas por inocente!
Namaste
susana colucci
