En el estado despierto, así como en el estado de sueños, el hombre es propulsado por el pensamiento. El pensamiento activa los sentidos, la palabra y el cuerpo. El ser inerte se vuelve dinámico mediante el pensamiento.
El despertar y el surgir del pensamiento son cosas simultáneas en el hombre. El pensamiento original del despertar y al despertar es 'Yo soy'. Todos nosotros, al despertarnos nos damos cuenta del 'Yo Soy' como si hubiéramos llegado de algún sitio. Es el pensamiento el que nos localiza a nosotros.
Cada uno de nosotros, antes de despertar 'Es' pero no es consciente de ello. Nosotros 'Somos' y nos despertamos 'para Ser'. Nosotros existimos antes y después de despertar. Al despertar tenemos consciencia del 'Ser'.
Antes de tal despertar hay el 'Ser' sin consciencia de ello. Ser es constante y despertar es periódico. Eso es cierto en nuestro caso así como en el de la Creación. El Gran Ser de la Creación existe con o sin creación, igual que el hombre 'es' con o sin despertar.
Cuando nos despertamos, nos despertamos también en el pensamiento. No existe un estado de "despertar sin pensamiento".
Después nos acordamos de otros pensamientos, relativos al nombre, al lugar de cada uno y pensamientos relativos a ello. Sucesivos pensamientos tienen su base en el pensamiento original, que existe como creencia de que 'YO SOY'.
Puede ser horroroso y chocante y hasta un frenesí si digo que el pensamiento de 'YO EXISTO' no es más que una creencia, pero es la verdad pura y dura. Este es el pensamiento fundamental en torno al cual se construye posteriormente todo. Este es el núcleo. A este núcleo se le representa simbólicamente como un punto rodeado por un círculo. El surgir de un punto es como nuestro despertar.
Lo mismo sucede con nosotros. Nosotros también despertamos del Trasfondo, creemos en el pensamiento de 'YO EXISTO' y seguimos adelante con otros pensamientos. El ser equilibrado se trasforma paulatinamente a sí mismo en dinámico mediante los pensamientos.
Los pensamientos dirigen la dinámica. El hombre, que hasta ahora era 'Ser' ahora adquiere auge y se convierte en 'hacer'. La mente, los sentidos y el cuerpo se activan y comienza la acción. Pero el 'Ser' sigue siendo mientras que el 'hacer' sigue como pensamiento a nivel de pensamiento y como acción en el plano objetivo.
De modo que el 'Ser', el Original, sigue siendo durante la actividad triangular del despertar, del pensar y del hacer. EL es constante mientras que estas tres actividades actúan teniéndole a EL como base. Sin su 'Ser' no hay despertar, pensar ni hacer. Este estado se representa simbólicamente así: Cuando el pensamiento rodea a su 'Ser', sólo permanece un pensamiento rodeando a su existencia.
(Tomado de Curación Espiritual - K. Parvathi Kumar - cont.)
El despertar y el surgir del pensamiento son cosas simultáneas en el hombre. El pensamiento original del despertar y al despertar es 'Yo soy'. Todos nosotros, al despertarnos nos damos cuenta del 'Yo Soy' como si hubiéramos llegado de algún sitio. Es el pensamiento el que nos localiza a nosotros.
Cada uno de nosotros, antes de despertar 'Es' pero no es consciente de ello. Nosotros 'Somos' y nos despertamos 'para Ser'. Nosotros existimos antes y después de despertar. Al despertar tenemos consciencia del 'Ser'.
Antes de tal despertar hay el 'Ser' sin consciencia de ello. Ser es constante y despertar es periódico. Eso es cierto en nuestro caso así como en el de la Creación. El Gran Ser de la Creación existe con o sin creación, igual que el hombre 'es' con o sin despertar.
Cuando nos despertamos, nos despertamos también en el pensamiento. No existe un estado de "despertar sin pensamiento".
Después nos acordamos de otros pensamientos, relativos al nombre, al lugar de cada uno y pensamientos relativos a ello. Sucesivos pensamientos tienen su base en el pensamiento original, que existe como creencia de que 'YO SOY'.
Puede ser horroroso y chocante y hasta un frenesí si digo que el pensamiento de 'YO EXISTO' no es más que una creencia, pero es la verdad pura y dura. Este es el pensamiento fundamental en torno al cual se construye posteriormente todo. Este es el núcleo. A este núcleo se le representa simbólicamente como un punto rodeado por un círculo. El surgir de un punto es como nuestro despertar.
Lo mismo sucede con nosotros. Nosotros también despertamos del Trasfondo, creemos en el pensamiento de 'YO EXISTO' y seguimos adelante con otros pensamientos. El ser equilibrado se trasforma paulatinamente a sí mismo en dinámico mediante los pensamientos.
Los pensamientos dirigen la dinámica. El hombre, que hasta ahora era 'Ser' ahora adquiere auge y se convierte en 'hacer'. La mente, los sentidos y el cuerpo se activan y comienza la acción. Pero el 'Ser' sigue siendo mientras que el 'hacer' sigue como pensamiento a nivel de pensamiento y como acción en el plano objetivo.
De modo que el 'Ser', el Original, sigue siendo durante la actividad triangular del despertar, del pensar y del hacer. EL es constante mientras que estas tres actividades actúan teniéndole a EL como base. Sin su 'Ser' no hay despertar, pensar ni hacer. Este estado se representa simbólicamente así: Cuando el pensamiento rodea a su 'Ser', sólo permanece un pensamiento rodeando a su existencia.
(Tomado de Curación Espiritual - K. Parvathi Kumar - cont.)