El protector de los animales y ejemplo del amor incondicional |
Se le considera protector de los animales y ejemplo de amor y de la concientización de ser uno con la Divinidad y con todo, tanto que, al Sol, la Luna y hasta a la muerte los llamaba hermanos. Creador de la tradición de colocar los nacimientos en Navidad. Fundó la compañía de los Franciscanos y de las Clarisas junto a la mujer que amaba, la hermana Clara.
Dejaron escrito, los que lo conocieron en vida, que levitaba al meditar y sintió con tanta intensidad la crucifixión que se estigmatizó. Una hermosa biografía de este santo la puedes leer de Ignacio Larrañaga “El hermano de Asís”.
Comparto contigo, como lo hago todos los años, una oración que me gusta, se
le atribuye al santo, aunque hay quienes dicen que no es así, que el autor es otro, lo que no cambia su belleza. Puedes tomar cualquiera de las frases y transformarla en una afirmación para este día, por ejemplo “Donde hay tristezas yo pongo luz”, “Hoy no busco ser comprendido sino comprender”, etc.:
le atribuye al santo, aunque hay quienes dicen que no es así, que el autor es otro, lo que no cambia su belleza. Puedes tomar cualquiera de las frases y transformarla en una afirmación para este día, por ejemplo “Donde hay tristezas yo pongo luz”, “Hoy no busco ser comprendido sino comprender”, etc.:
Señor, haz de mi un instrumento de tu paz.Que allá donde haya odio, yo ponga amor.
Que allá donde haya ofensa, yo ponga perdón.
Que allá donde haya discordia, yo ponga unión.
Que allá donde haya error, yo ponga verdad.
Que allá donde haya duda, yo ponga Fe.
Que allá donde haya desesperación, yo ponga esperanza.
Que allá donde haya tinieblas, yo ponga luz.
Que allá donde haya tristeza, yo ponga alegría.
Oh Señor, que yo no busque tanto ser consolado, cuanto consolar,
ser comprendido, cuanto comprender,
ser amado, cuanto amar.
Porque es dando como se recibe,
es olvidándose de uno mismo como uno se encuentra a sí mismo,
es perdonando, como se es perdonado,
es muriendo como se resucita a la vida eterna.
Que allá donde haya ofensa, yo ponga perdón.
Que allá donde haya discordia, yo ponga unión.
Que allá donde haya error, yo ponga verdad.
Que allá donde haya duda, yo ponga Fe.
Que allá donde haya desesperación, yo ponga esperanza.
Que allá donde haya tinieblas, yo ponga luz.
Que allá donde haya tristeza, yo ponga alegría.
Oh Señor, que yo no busque tanto ser consolado, cuanto consolar,
ser comprendido, cuanto comprender,
ser amado, cuanto amar.
Porque es dando como se recibe,
es olvidándose de uno mismo como uno se encuentra a sí mismo,
es perdonando, como se es perdonado,
es muriendo como se resucita a la vida eterna.
Francisco decía “el Amor no es amado” para explicar porqué la vida no era lo hermosa que debiera, aún sigue vigente su afirmación. Tengo la certeza que, si todos lográramos amar al Amor, que es la energía que nos hace posibles, el Mundo sería otro.
Amemos al Amor
susana colucci