Ya vimos cómo se prepara el del tronco, recogiendo sus cenizas. En esta oportunidad hablaremos de los panes y del billete.
Para el primero la recomendación es colocar una cesta con panes pequeños en la mesa, el número de panes dependerá del número de comensales y si te aplicas en las manualidades, puedes identificarlos con el nombre de cada quien.
Esos panes no se deben comer, solo deben estar en la mesa durante toda la cena y ser entregados al finalizar esta, de forma tal que cada quien lo guarde en su alacena y así las energías de la abundancia ayuden a que nunca falte comida en cada casa.
El segundo es igual de sencillo y se practica si quieres que a tus invitados nunca les falte dinero en el año que está por comenzar.
Se trata de colocar un billete en cada silla de forma tal que, los comensales, se sienten encima del que le corresponde. Al finalizar la cena, cada quien tomará el suyo y lo guardará en un lugar de su cartera en el cual permanecerá hasta la próxima Navidad, momento en el cual debe gastárselo comprando algo que sea de su gusto. Si alguno olvida tomarlo no debes recordárselo… a el no le corresponde.
Es importante destacar que, en ambos casos, si ocurre algo desagradable durante el evento, los talismanes perderán su fuerza y deberán ser desechados.
Namaste
Susana Colucci