Si lees el Bhagavad Gita, las enseñanzas de Buda, las enseñanzas de Jesús, el Kibalyon... y buscas la esencia de esos mensajes es posible que notes que son la misma... esa semejanza desde hace años está dando vueltas en mi cabeza y no deja de asombrarme cada vez que dilucido una más. Somos Uno con el Todo, pero no nos damos cuenta.
A veces no encontramos las palabras adecuadas para expresar lo que pensamos pero las leemos en otros que con claridad lograron escribirlas, por lo que cuando eso me pasa no dudo en compartir textos ajenos a mi, contigo. En esta oportunidad en "Descubriendo el mago interno" de Amelia Lamaignere encontré un planteamiento sobre la semejanza en las creencias que me gusto para publicarlo:
Con el paso de los años, y a medida que consigo reflexionar con mas serenidad y desapego sobre inquietudes con respecto a los orígenes de la humanidad, no dejo de sorprenderme ante el paralelismo de creencias y practicas integradas en el Globo terráqueo, y parece como si la clave de todo fuera una verdad universal que abarcara este abracadabra cosmogónico, reduciéndolo al común denominador de un único origen para todos los humanos, y que al mismo tiempo, estaríamos interconectados por redes invisibles que nos darían la misma base de sustento espiritual, con las modificaciones propias de cada entorno geográfico… y entonces, quiza, la incógnita quedaría justificadas en base al principio hermético de Todo es Uno, que es asimismo una de las "Probabilidades de la fisica cuántica".
A veces lo mas sencillo es lo mas difícil de comprender. Dejo la pregunta en el aire, para reflexión del que tenga interés.
Feliz domingo
Namaste
susana colucci