No lo se… siempre me asombra la gente que habla con propiedad sobre la vida después de la muerte, sin haber al menos pasado por una experiencia cercana a ella. Pero es interesante leerlos.
Eckhardt Tolle, quien dice haber vivido una profunda experiencia interior que cambió su vida a los 29 años, en su libro El poder del ahora, dice que, en el momento exacto de la muerte tenemos una de las oportunidades de alcanzar la iluminación, el entendimiento de ser uno y trascender, aun cuando no lo hayamos logrado antes; que en ese instante final se abre un puerta, pero que son pocos las que la ven, porque su apego a esta vida y los bienes materiales no se lo permiten.
Eso me puso a pensar, recordé a Houdini y su esposa, que hicieron un pacto de encuentro, se dijeron que el que muriera primero se pondría en contacto con el otro, pero eso nunca ocurrió. Será que no pudo cruzar el umbral? que no quería morir… ? por tanto puede que no vio esa puerta y al quedarse en lista de espera para regresar a este plano, no pudo tomar contacto.
Por otro lado, las historias de las personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte, cuando ésta los toma de improviso parece que si… conozco personalmente a dos, que murieron clínicamente sin previo aviso, y estuvieron en otro mundo mientras veían este. Se observaron desde afuera, a ellos mismos y a los que estaban aquí que trataban de hacerlos regresar, aun cuando no querían hacerlo por lo bien que se sentían; hasta que retornaron y me lo pudieron contar. La puerta está ahí, pero solo la cruzarán los que no estén atados a este mundo y sepan verla.
Quizás fue eso lo quiso decir Jesús a sus apóstoles con su parábola de las esposas, las lámparas y el marido que regresa de viaje, cuando sugirió que debíamos estar siempre alerta. He vivido con personas que aún sabiendo que está por llegarles el momento se niegan a ello, le tiene miedo a viajar con la Parca. No saben que pudieran estarse quitando la oportunidad de pasar una puerta que nos lleva a otro mundo… quizás a la vida después de la muerte.
Namaste
susana colucci
Eckhardt Tolle, quien dice haber vivido una profunda experiencia interior que cambió su vida a los 29 años, en su libro El poder del ahora, dice que, en el momento exacto de la muerte tenemos una de las oportunidades de alcanzar la iluminación, el entendimiento de ser uno y trascender, aun cuando no lo hayamos logrado antes; que en ese instante final se abre un puerta, pero que son pocos las que la ven, porque su apego a esta vida y los bienes materiales no se lo permiten.
Eso me puso a pensar, recordé a Houdini y su esposa, que hicieron un pacto de encuentro, se dijeron que el que muriera primero se pondría en contacto con el otro, pero eso nunca ocurrió. Será que no pudo cruzar el umbral? que no quería morir… ? por tanto puede que no vio esa puerta y al quedarse en lista de espera para regresar a este plano, no pudo tomar contacto.
Por otro lado, las historias de las personas que han tenido experiencias cercanas a la muerte, cuando ésta los toma de improviso parece que si… conozco personalmente a dos, que murieron clínicamente sin previo aviso, y estuvieron en otro mundo mientras veían este. Se observaron desde afuera, a ellos mismos y a los que estaban aquí que trataban de hacerlos regresar, aun cuando no querían hacerlo por lo bien que se sentían; hasta que retornaron y me lo pudieron contar. La puerta está ahí, pero solo la cruzarán los que no estén atados a este mundo y sepan verla.
Quizás fue eso lo quiso decir Jesús a sus apóstoles con su parábola de las esposas, las lámparas y el marido que regresa de viaje, cuando sugirió que debíamos estar siempre alerta. He vivido con personas que aún sabiendo que está por llegarles el momento se niegan a ello, le tiene miedo a viajar con la Parca. No saben que pudieran estarse quitando la oportunidad de pasar una puerta que nos lleva a otro mundo… quizás a la vida después de la muerte.
Namaste
susana colucci