En un estudio realizado con deportistas de la Universidad Tufts, en Massachusetts, aquellos que no bebieron líquidos durante la práctica se sintieron más enojados, tensos, confundidos y tristes después de ella que los que tomaron mucha agua.
“Presentaban una deshidratación comparable a la que experimentan los oficinistas muy ajetreados que no beben suficientes líquidos a lo largo del día”, dice Kristen E. D’Anci, la directora del estudio.
La cantidad que necesitas beber depende de tu nivel de actividad, tu peso y de si hace calor o frío, pero la especialista asegura que “ocho vasos de agua al día no le hacen daño a nadie”.
Tomado de Selecciones México, julio 2010