horoscopia: En los días de menguante limpia tus espacios y recarga la energía de prosperidad y abundancia.

Al finalizar vuelve a refrescar el ambiente esta vez con incienso de miel o violetas.

Este ritual deberá ser hecho es días de menguante, especialmente el que antecede a Luna nueva y puede ser repetido cada vez que sientas que el ambiente está pesado o antes de iniciar algún periodo sea personal, astrológico, chino etc..

Lo primero que debes hacer es encender en cada uno de los espacios de la casa incienso de lavanda, sándalo o canela, tantas varillas como puedas sin escatimar, y mientras se consumen colocar una música melodiosa o hacer sonar una campana de plata, cristal o bronce, cascabeles, cristales o móviles de sonido para que las energías estancadas empiecen a moverse y se restablezca el equilibrio.

Una vez que se hayan consumido totalmente todas las varillas, barre de adentro hacia afuera sacando de la casa todo lo recogido, luego de eso limpia el piso tres veces con agua, la primera de la forma que lo haces habitualmente de adentro hacia afuera mientras visualizas todo lo malo está siendo recogido por tu acción y vertido en el agua en la que irás limpiando la mopa y que al finalizar verterás fuera de la casa, preferiblemente en una alcantarilla o donde corra agua. La segunda y tercera vez prepara el agua con infusión de hierbabuena, ruda, tua tua o albahaca y limpia de afuera hacia adentro mientras visualizas a las energías de abundancia, prosperidad, salud, armonía y todo lo que quieres obtener entrando en el espacio que estás tratando, el agua resultante de esta última limpieza debes usarla para regar el jardín o la viertes en el patio (si vives en un apartamento y no tienes jardinera ni modo, viértela en uno de los desagües)

Al finalizar vuelve a refrescar el ambiente esta vez con incienso de miel o violetas.

Para aquellos que gustan de las invocaciones comparto hoy una que puedes repetir al finalizar la limpieza:

Divinidad que en mi resides, te doy las gracias por la maravillosa labor de amor, alegría y paz que realizas. Te activo desde mi corazón, en mi hogar y dondequiera que voy y te reconozco como huésped privilegiado a quien deseo agasajar.

Solicito, acepto, recibo y realizo la abundante provisión para la humanidad, para mi familia, para mis amigos y para mí.

Invoco al perdón y a tu poder inmenso e imperecedero para que consuma, transmute, disuelva y libere con amor todo lo negativo en mi hogar y en todo el planeta Tierra, para que la paz, el amor, la armonía, el equilibrio, la alegría y el Orden Divino, llenen mi vida, mi casa, mi país y a toda la Humanidad.

Lo siento y lo percibo es ahora! Gracias, gracias, gracias.

A continuación haz una breve meditación en la que prestes atención a tu respiración y escuches el silencio de tu mente.