Según el Sutra de la Atención Mental (Satipattana Sutta), mientras se friegan los platos, uno debe estar solamente fregando los platos; lo cual quiere decir que mientras se hace eso, uno debe estar completamente atento al hecho de que está fregando.
A primera vista, puede parecer un poco tonto: ¿Porqué poner tanta preocupación en algo tan simple? Pero ese es precisamente el asunto, Quang. El hecho de que yo esté aquí lavando las tazas, es una realidad maravillosa. Estoy siendo totalmente yo mismo, siguiendo mi respiración, consciente de mi presencia y presente de mis pensamientos y acciones. No hay forma de ser zarandeado estúpidamente de aquí para allá por las olas. La conciencia no puede ser dispersada como la espuma en la cresta de las olas, cuando se estrellan contra el acantilado.
Si mientras lavamos los platos, solamente estamos pensando en la taza de té que nos aguarda o en cualquier otra cosa que pertenezca al futuro, o nos apresurarnos a quitarnos los platos de encima como si fuera alguna molestia, entonces no estamos “fregando los platos para fregar los platos”.
Y lo que es más, no estamos vivos durante el tiempo en que tardamos en hacerlo. De hecho, somos completamente incapaces de apreciar el milagro de la vida, mientras permanezcamos ante la pila de platos.
Si no podemos fregar los platos, todas las oportunidades serán de que tampoco podremos disfrutar nuestra taza de té; mientras nos la bebemos estaremos pensando en otras cosas, apenas despiertos al hecho de la taza de té que tenemos ante las manos.
De ése modo, estaremos absortos en el futuro y lo que significa realmente es que seremos incapaces de vivir un sólo momento de nuestra vida.
Thich Naht Hanh
A primera vista, puede parecer un poco tonto: ¿Porqué poner tanta preocupación en algo tan simple? Pero ese es precisamente el asunto, Quang. El hecho de que yo esté aquí lavando las tazas, es una realidad maravillosa. Estoy siendo totalmente yo mismo, siguiendo mi respiración, consciente de mi presencia y presente de mis pensamientos y acciones. No hay forma de ser zarandeado estúpidamente de aquí para allá por las olas. La conciencia no puede ser dispersada como la espuma en la cresta de las olas, cuando se estrellan contra el acantilado.
Si mientras lavamos los platos, solamente estamos pensando en la taza de té que nos aguarda o en cualquier otra cosa que pertenezca al futuro, o nos apresurarnos a quitarnos los platos de encima como si fuera alguna molestia, entonces no estamos “fregando los platos para fregar los platos”.
Y lo que es más, no estamos vivos durante el tiempo en que tardamos en hacerlo. De hecho, somos completamente incapaces de apreciar el milagro de la vida, mientras permanezcamos ante la pila de platos.
Si no podemos fregar los platos, todas las oportunidades serán de que tampoco podremos disfrutar nuestra taza de té; mientras nos la bebemos estaremos pensando en otras cosas, apenas despiertos al hecho de la taza de té que tenemos ante las manos.
De ése modo, estaremos absortos en el futuro y lo que significa realmente es que seremos incapaces de vivir un sólo momento de nuestra vida.
Thich Naht Hanh